Colegio
Nuestra Señora de la Misericordia
-San Fernando-
Agradecimientos directivos
Soy argentino, mi país me necesita,
para poder abrir los ojos a la vida
hay que animarnos a nacer de nuevo
igual que aquella tarde en Tucumán…
Estimados Colegas, vaya nuestro reconocimiento y las más sinceras felicitaciones a todos aquellos que, de una u otra manera, han organizado, participado o bien colaborado en los Actos de Conmemoración del Bicentenario de nuestra Independencia.
Comenzamos agradeciendo la valiosa tarea de coordinación de los Directivos de cada nivel, misión que han asumido con solidez, claridad y compromiso.
Desde la Profesora responsable de recrear la fachada de la Casa Histórica, hasta quienes tuvieron a su cargo la organización de la muestra y la puesta en escena de las danzas folclóricas en el patio central, en el Nivel Secundario
Desde la creadora de la propuesta del Congreso “Soñar lo imposible y hacerlo proyecto común”, una verdadera obra de ingeniería de amor patriótico hasta las Maestras de los Niveles Inicial y Primario quienes asumieron con mucho amor y compromiso la tarea de plasmarlo frente a la comunidad trabajando con sus alumnos, empresa que además de capacidad y paciencia requiere de un verdadero sentimiento de amor por los niños.
Desde la invalorable colaboración de los Docentes de las materias especiales y coordinadores, hasta la entrega desinteresada del personal que asumió importante tarea de atención a los padres y alumnos en las meriendas compartidas.
Desde el Personal de Maestranza que extremó sus esfuerzos para que la escuela luzca en excelente estado, hasta el de Portería que con mucha amabilidad le puso un broche de distinción a la atención a las familias.
Dejamos para el final a nuestros queridos niños y jóvenes. Nuestro reconocimiento para ellos que son el “motivo” de todo lo que se hace.
Nuevamente, felicitaciones a todos y el agradecimiento fraterno.
Aprovechamos la oportunidad para desearles un feliz descanso durante el receso y que el regreso nos encuentre nuevamente juntos, trabajando por y para los niños, bendecidos por la Santa Virgen, nuestra Madre del Cielo y por nuestra Madre del Corazón Grande, Santa María Josefa Rossello.
Sinceramente, Lidia y Guillermo